En la actualidad podemos encontrar mucha información que tenga que ver con dietas. Existe un suministro constante de enfoques para la pérdida de peso a través de literatura, por el boca a boca o fundamentalmente por internet. Es verdad que algunos de esos enfoques pueden llegar a ser adecuados, pero la mayor parte de ellos hacen hincapié en resultados rápidos con un mínimo de esfuerzo. Estos últimos tipos de métodos para reducir el peso pueden llegar a carecer de principios alimentarios sanos y pueden guiar a padecer alguna deficiencia nutricional durante un periodo prolongado. En raras ocasiones estas deficiencias se hace reales ya que el continuar este tipo de dieta se hace prácticamente imposible, con lo cual esto deriva en un abandono en el lapso de algunas semanas.
Otra de las contras de las dietas de moda, que prometen resultados poco realistas, es que el individuo se carga de frustración al crearse en altas expectativas. Desgraciadamente, esto deriva en sentimientos de impotencia para manejar problemas de peso.
Es muy común encontrar dietas con reducción de carbohidratos y ricas en proteínas, mal llamada “Dieta Proteiada”. Muy popular también es la dieta de la “Zona”, la que dice basarse en mantener los valores de insulina estables. Últimamente está ganando mucha popularidad el test de sensibilidad a los alimentos. Este tipo de dietas fomenta la supresión en la nutrición diaria de algunos grupos de alimentos. En realidad, todas estas estrategias tienen un mismo denominador común, que es la restricción calórica.
De este modo, podemos encontrar muchas más dietas que carecen de evidencia y fundamento científico. Algunas de ellas se explicarán con más detalle.
Dietas muy pobres en calorías
Este tipo de dieta, por lo general, promueven una práctica alimentaria con un consumo promedio de energía en torno a las 800 Kcal. Así, estas modalidades para reducir peso, prometen unos descensos de peso de forma rápida y van de la mano de las exigencias sociales que vivimos a día de hoy.
Los peligros que podemos encontrar son, por ejemplo, un bajo contenido de energía para realizar actividades cotidianas, esto hace que sea muy dificultoso continuar este tipo de dietas muy pobres en calorías en el tiempo. Por lo tanto, si no se tiene una gran motivación puede que el resultado sea la deserción y la frustración.
Muchas veces una frustración sumada a otras por la práctica sostenida de dietas inadecuadas para adelgazar, crea pensamientos negativos que impedirán una futura motivación para la práctica de un plan alimentario bien confeccionado y adecuado para reducir peso.
Otras de las contras es la adaptación que sufre el metabolismo con la incorporación de muy pocas cantidad de Kcal diarias. Esto hace que la energía que consume diariamente un individuo se adecua a esa restricción como medida adaptativa, para derivar en un gasto metabólico pobre y difícil de revertir, pudiendo transformarse en el efecto Yo-Yo o rebote.
Dietas Disociadas (Hay, Shelton, Beberly Hills)
El fundamento de éstas radica en la prohibición de la mezcla de algunos alimentos en el mismo plato o algunas hasta prohíben mezclar absolutamente nada y casi todas ellas prohíben comer la fruta después de las comidas. Esta modalidad tiene como origen en teorías no científicas, las cuales se han popularizados en los últimos años.
Según la Asociación de Dietistas Española , no existe ningún indicio científico de que el cuerpo necesite separar proteínas, carbohidratos y grasas porque sean incapaz de digerirlos juntos.
Los riesgos que puede ocasionar la práctica de este tipo de dietas son, por ejemplo, el tomar carbohidratos en menores cantidades de lo recomendado y proteínas y/o grasas en exceso.
El prohibir la fruta luego de las comidas
No existe ningún estudio científico que avale el prohibir la fruta luego de las comidas y, además, esto estaría implicando la disminución del consumo de frutas, las cuales son muy importantes consumir diariamente por el aporte de fibra, vitaminas y minerales.
Otros de los puntos importantes a tomar en cuenta en este tipo de dietas es que no cumplen con los gustos y hábitos alimentarios normales. Es decir, no llevan a la práctica una nutrición adecuada. El seguir este tipo de dietas requiere de una voluntad férrea para lograr la reducción de peso.
Está claro que el comer como sugiere La Dieta Disociada hace que se consuma una menor cantidad de calorías al día (lo que conlleva el no poder mezclar alimentos) pero a un costo alto porque requiere de una alta voluntad para seguirlas y soportar la monotonía que este tipo de alimentación requiere.
Dieta rica en proteínas y pobre en carbohidratos.
También conocida como la dieta cetogénica, hace énfasis en el efecto anoréxico (pérdida de apetito) de la cetosis.
Los peligros que ocasionan estas dietas son variados y amplios. Como primera medida, no son suficientes en fibra alimentaria y carece de vitaminas y minerales. Cuando se entra en estado de cetosis, pueden causar vómitos, nauseas, cefaleas, fatiga y apatía.
Las dietas proteinadas o cetogénicas no producen un cambio favorable en la conducta alimentaria. Organismos como la” Asociación Americana de Dietistas” (ADA) condena estas dietas como potencialmente riesgosas para la salud porque pueden elevar el nivel total del colesterol en sangre como así también el ácido úrico.
Contraindicado por los expertos en obesidad
Esto va en contrapartida de lo aconsejado por un organismo internacional dedicado a la salud de la población, como la “Asociación Americana de Dietistas”, los cuales alientan a que el profesional sanitario debe ayudar a los pacientes a aceptar un cambio modesto del peso, sostenible en el tiempo, conseguido de forma razonable”
Potenciales daños asociados a su realización
Ingerir una elevada cantidad de proteínas de origen animal puede aumentar los valores del colesterol sanguíneo. Otra contra significativa de las dietas cetogénica es que la realización de este tipo de dietas, es la monotonía en sus primeras etapas. Ello hace muy complicado el seguimiento.
La falta de calorías hace que el individuo esté en riesgo de padecer agotamiento provocado por la ingesta exclusiva de proteínas, y además por una falta de vitaminas y minerales. Por lo tanto, esto supone un problema para obtener todos los nutrientes que nuestro cuerpo necesita a diario y dicho de esta forma esta dieta, en sus primeras etapas, supone un problema grave para la salud.
Estos métodos proponen una restricción alta de carbohidratos. Entonces, la energía que necesita una persona diariamente se va a ver comprometida y más si necesitamos de ésta en forma abundante y al instante. Es decir, una persona deportista o que realiza trabajos activos puede padecer síntomas de fatiga permanente, pérdida de concentración, bajo rendimiento etc.
Aporte alto de proteínas
Con el aporte muy alto de proteínas, estas dietas hace que el metabolismo deba procesarlas en alta cantidad y esta sobrecarga proteica supone un esfuerzo aumentado en el trabajo renal por filtrar una gran cantidad de restos de proteínas (metabolitos nitrogenados); siendo así de gran problema para personas que padezcan insuficiencia renal o con problemas de ácido úrico aumentado en sangre (hiperuricemia). Por lo que si una persona, de forma general, experimenta una patología como tal o presenta analíticas con ácido úrico en sangre por encima de los valores de referencia, debe descartar la práctica de este método.
El cambio drástico de alimentación y del metabolism
El cambio drástico de alimentación y del metabolismo es otro factor de riesgo que ofrece esta dieta. La eficacia de las dietas ricas en proteínas radica en la restricción del mayor nutriente energético del cuerpo como son los carbohidratos; el cuerpo debe abastecerse de sus reservas. Esto hace que este cambio drástico y riesgoso no sea saludable por ocasionar un cambio abrupto en las formas cotidianas de comer de las personas en general y del funcionamiento metabólico. A su vez, es conveniente remarcar que la práctica prolongada origina una carencia de nutrientes esenciales.
Efectos de la Cetosis
Entre otros efectos secundarios de la cetosis podemos citar los dolores de cabeza continuos, mareos, mal aliento y además problemas metabólicos graves. Todo esto no hace más que indicarnos que este método para la reducción de peso, no cumple con las leyes nutricionales, tales que, una dieta debe contener cantidades de nutrientes necesarias, calidad de los alimentos, llevar una armonía y una adecuación desde el punto de vista nutricional alimentario. Como dato principal una dieta cetogénica debe llevar un continuo control médico.
Un repaso de lo que hay en el mercado
biManán Pro 3.2.2
La dieta biManán se descompone en tres fases (3 días + 2 días + 2 días), de ahí los números que acompañan al nombre. Los tres primeros días son los más fuertes y que normalmente suelen ser de Lunes a Miércoles. Los 2 siguientes días la dieta se relaja un poco, añadiendo más alimentos, y son para el Jueves y Viernes. Los 2 últimos días se añaden más hidratos de carbono y coinciden con el Sábado y el Domingo.
Es de destacar de este método que no existe evidencia alguna que pruebe la veracidad de este concepto sea adecuado para una pérdida de peso.
Dieta Siken
En un método de adelgazamiento que consta de distintas etapas como: Inicial, adelgazamiento, Transición y Estabilización. Se basa en una dieta proteinada que al reducir la ingesta de hidratos de carbono y grasas y dar un aporte extra de proteínas. Esto obliga al metabolismo a utilizar como fuente de energía sus reservas de grasa. Este método dispone de tres programas para elegir en función a objetivos. Cada uno de ellos cuenta con una fase inicial, una fase de adelgazamiento, otra de transición y una etapa final de estabilización.
Es una dieta típica cetogénica a la que se le añade un factor riesgoso más que es la practica sin la vigilancia de personal médico. Otorgandole de esta forma un riesgo potencial para la salud.
Dieta Pronokal
Es un método de adelgazamiento bajo control médico, cuyo objetivo es una pérdida de peso de manera violenta y riesgosa, incluso cuando la bajada de peso debe ser de pocos kilos.
El Método es un tratamiento de pérdida de peso basado también en una dieta Proteinada. Es decir, consigue el adelgazamiento sometiendo al metabolismo a un funcionamiento anormal para poder utilizar las grasas como combustible energético (cetogénesis). De esta forma el cuerpo crea cuerpos cetónicos produciendo un efecto anoréxico (pérdida de apetito).
Este método debe ser seguido por un doctor por el peligro que significa para la salud entrar en un estado de cetosis. Se divide en tres etapas: adelgazamiento, reeducación alimentaria y mantenimiento. En la primera de ellas, cuya duración varía según el peso que se precisa perder, el cual puede durar meses. La segunda de reeducación y mantenimiento es siempre la que resulta más difícil de seguir y generalmente es donde se recupera todo el peso perdido o más.
Dieta Flash
Consta de 3 etapas fundamentales:
- Adelgazamiento: durante esta etapa se elimina el 80% del sobrepeso y la duración variará según el peso que se precisa perder.
- Reeducación alimentaria: en esta etapa se sigue perdiendo el peso restante mientras se introducen en la dieta algunos alimentos.
- Mantenimiento: es la fase en la que se alcanza el equilibrio alimentario. Como siempre en este tipo de dietas es aquí la etapa más difícil de seguir y de conseguir el objetivo porque es cuando generalmente se recupera el peso perdido o se aumenta aún más.
El funcionamiento se basa en una primera etapa de acción y una segunda de Reacción. Siempre con la ayuda de un manual de consejos.
Sin lugar a dudas, es una dieta que reúne todos los riesgos de una dieta cetogénica, con el factor agregado de que no es monitoreada por un médico.
En resumen
Todos los métodos nombrados anteriormente tienen un factor en común que todas o casi todas este tipo de dietas provocan una alteración del estado metabólico del cuerpo como es la cetósis. En este sentido se debe tomar conciencia que para bajar de peso no es necesario tomar medidas extremas ni practicar conductas inadecuadas que puedan llegar a dañar la salud. Es por ello que si se desea reducir el peso se debe escoger la dieta más saludable.
Conclusión
Para concluir con este concepto, las dietas milagro o una dieta de moda o dieta sin un fundamento científico ni estudio clínico que la avale, no puede ser tenida en cuenta como un método seguro y adecuado para la reducción de peso. Como bien se sabe, el problema de la obesidad y sobrepeso es algo que nos aqueja en estos tiempos, como así también, el afán por bajar de peso a cualquier precio. Los profesionales de la salud y más aún los expertos en alimentación, deben alertar y concienciar a la población y a su vez educar cómo saber identificar y distinguir si una dieta es adecuada para reducir peso de forma saludable y efectiva. Es por ello que saber si el plan alimentario es realista, satisface las necesidades nutricionales, recomienda actividad física, controla cantidades de las porciones y contribuye con los buenos hábitos alimentarios, es imprescindible a tener en cuenta antes de plantearse escoger una dieta. Comprender que una buena nutrición nos dará calidad de vida es lo que debe hacer tomar conciencia antes de practicar una dieta sin un fundamento que la respalde. La salud es única y se debe cuidar de métodos que signifiquen un potencial peligro para ésta.